¿Nos hemos vuelto locos?

La semana del 20 de mayo de 2013, el semanario The Economist consideraba que el continente, más que “convaleciente” de la crisis, está en profunda “decadencia” y alerta a los líderes europeos para que “se sacudan el letargo antes de que la zona euro se estanque o, definitivamente, se haga añicos”.

Ayer, 28 de mayo, los líderes europeos se han reunido en París para crear su “New deal” y determinar QUÉ camino hay que tomar para salir de la crisis y QUÉ hacer para ocupar a nuestros jóvenes; sin embargo, se sigue sin tener en cuenta que, si bien es importante elegir el mejor camino, es mucho más importante CÓMO recorrerlo y CON QUIÉN hacerlo.

¿Por qué no les dejamos a nuestros jóvenes que participen en el recorrido de ese camino, ya que es ahí donde se va a construir el futuro que les pertenece?… ¡PORQUE, ES SUYO!

Actualmente, tenemos más de seis millones de PARADOS, un 57 % de PARO juvenil, universitarios que “marchan sin parar”… ¿Y las INICIATIVAS e IDEAS para generar empleo, también vamos a tenerlas paradas?. ¿Nos hemos vuelto locos? (Si se desea ver el razonamiento detallado sobre esta alarmante pregunta, puede hacerse a través de la ENTREVISTA,(pendiente de publicar), realizada a Isidro Villar, Presidente de Eurodirsa).

Desde hace más de año y medio, un grupo de jóvenes universitarios que responden al nombre de Up! (Universitarios preparados/preocupados), pretenden colaborar, “arrimando el hombro” con el Gobierno, para llevar a cabo un Proyecto de “optimización de recursos” que sirva para ayudar a los actuales empleados y funcionarios de las Empresas y Administraciones Públicas y otro Proyecto de “empleo juvenil” que les permita reducir el déficit de manera “racional” e iniciar su joven carrera profesional, antes que permanecer viendo cómo se destruye su futuro.

Solo le piden al Gobierno que les conceda la OPORTUNIDAD de poner a prueba laINICIATIVA DE OPTIMIZACIÓN Y EMPLEO, que ha dado tan buenos resultados en las empresas y que, actualmente, continúa haciéndose en aquellas empresas y administraciones públicas que quieren modernizarse y evitar situaciones lamentables como las que están sufriendo actualmente. Si, tras aceptar unaDEMOSTRACIÓN de nuestra metodología, de tan solo CINCO DÍAS, comprobasen que, el proyecto de empleo ofrecido, favorece a la economía productiva de nuestro país, podría iniciarse inmediatamente su aplicación, lo cual daría una oportunidad de empleo a 15.000 universitarios. (Como Presidente de Eurodirsa, me comprometo a ponerme “manos a la obra” HOY MISMO, con toda mi experiencia profesional para, con la implicación de los asesores del Gobierno y de las Organizaciones Sindicales, poder hacer realidad esta INICIATIVA de optimización y empleo juvenil cuanto antes).

Por motivos de la crisis, el Gobierno quiere que, los recursos públicos adelgacen los 30 kilos de grasa que habían engordado (empleados y funcionarios); sin embargo, si se hace de forma irracional y compulsiva (igual que cuando se hizo para engordar), se corre el riesgo de recortar el músculo -en vez de la grasa- y no lograr lo que se pretende: “reducir el déficit”. Y, además, lamentablemente, quedarán debilitados los recursos humanos que permanezcan en activo.

Tenemos que apoyar a aquellos empleados y funcionarios que “realmente son necesarios”. Ellos son los CONDUCTORES de vehículos que precisan de la colaboración de eficaces MECÁNICOS para tener en perfecto estado sus coches y realizar una conducción diaria más segura. (Los mecánicos no les sustituyen en la conducción, pero les ayudan y previenen para que, sus vehículos, no sufran averías y puedan realizar eficazmente sus actividades).

Tales mecánicos serían los JÓVENES UNIVERSITARIOS, quienes, una vez adiestrados para ello, aportarían su conocimiento a favor de los citados conductores, ayudándoles en una conducción que les evitaría fallos que pudiesen ocasionarles accidentes y les protegería de sufrir recortes de músculo (DESPIDOS), en lugar de recortar la grasa incorporada en su día. Incluso, a aquellos que no les afecte el despido, les beneficiaría, porque les permitiría recuperar la motivación e incentivos económicos que tenían. (¡Eso sí, utilizando los medios “de forma diferente”!).

Dichos universitarios, a la vista de la situación, avalada por diversas noticias de prensa, continúan insistiendo e insistiendo, ante los distintos grupos parlamentarios, para que, sin perjuicio de que protesten por la POLÍTICA que sigue el Gobierno (CAMINO elegido), se pongan a trabajar en CÓMO recorrer “de la mejor manera posible” dicho camino, siendo conscientes de que, otros caminos elegidos anteriormente, tampoco resultaron demasiado acertados.

Y puesto que, hasta la fecha, solo han obtenido buenas palabras del Gobierno, pero ninguna RESPUESTA para probar la INICIATIVA propuesta, han decidido contactar con los responsables de la Comisión Europea, con quienes están manteniendo actualmente conversaciones que permitan poner en marcha estos PROYECTOS, ya que, desde el Gobierno, solo se continúan proponiendo MEDIDAS, … y eso viene después de los PROYECTOS.

Las MEDIDAS serían algo semejante a las HERRAMIENTAS que podrían emplearse para reparar los vehículos antes mencionados, pero, lo que es imprescindible, es saber “cómo repararlo” y -esto último- es lo que pretenden los PROYECTOS que nos ocupan, ya que dan RESPUESTAS a aquellas NECESIDADES que tenemos para salir de la crisis.

¿Apostamos por un EMPLEO DE CALIDAD, para que nuestros jóvenes puedan construir su futuro, o nos resignamos y asumimos que son UNA GENERACIÓN ABANDONADA?. No desearía que tuviese razón el joven universitario que, hace pocos días, se ha dirigido por televisión a los políticos, diciéndoles: ¡NOS ESTÁIS ROBANDO LA VIDA!

Estimados jóvenes amigos, os animo a seguir insistiendo en vuestro SUEÑO de “construir un futuro más justo y solidario” y, mientras continuáis en ello, me viene a la memoria aquella frase que dirigíais a los grupos políticos en la Manifestación del 15 de Mayo de 2011: “Si no nos dejáis SOÑAR no os dejaremos DORMIR”.

¡Ojalá que consigan poder dormir pronto! SERÍA UNA BUENA SEÑAL.

Ánimo y un fuerte abrazo.

Isidro Villar